De la eléctrica a la de paseo, esto es todo lo que necesitas saber. Tanto si quieres afrontar descensos por el barro del bosque, como si quieres probar a correr por la carretera o simplemente pasear por el camino de sirga del canal local, encontrarás una bicicleta que se adapte a tus necesidades. La pandemia de coronavirus nos ha cambiado la forma de hacer deporte. Ha hecho que muchas de las formas favoritas del país para mantenerse en forma queden fuera de juego. Por ello, cada vez más personas recurren a las dos ruedas para su dosis diaria de ejercicio. 

La aparentemente sencilla tarea de elegir una nueva bicicleta puede convertirse rápidamente en un dolor de cabeza, gracias en gran medida a la vertiginosa cantidad de subgéneros que existen. No todas las bicicletas son iguales. Por eso, el primer paso a la hora de comprar una debería ser conocer los diferentes tipos que se ofrecen y decidir cuál es la que mejor se adapta a tus necesidades.

Aquí encontrarás información clave sobre los tipos de bicicleta más comunes, el tipo de ciclista al que se adaptan y su historia. Ya sea que estés planeando lanzarte por descensos embarrados en el bosque, probar tu suerte en las carreras de carretera o simplemente pasear por el camino de sirga de tu canal local, a continuación encontrarás una máquina que se ajuste a tus necesidades.

¿Qué tipo de bicicleta es la mejor para mí?

• Bicicleta plegable En las grandes ciudades, donde el espacio es escaso, no todo el mundo tiene el lujo de poder guardar una bicicleta de tamaño normal. ¿La solución? Conseguir una que se pliegue lo suficientemente pequeña como para meterla en un armario. Una bicicleta plegable es la compañera perfecta para los desplazamientos urbanos. Es pequeña, práctica y puedes llevarla en el transporte público sin convertirte en el enemigo público número uno.

• Bicicleta de carretera de competición. Para los que necesitan velocidad, una bicicleta de carreras podría ser la mejor opción. Con un manillar caído, neumáticos finos y una posición de conducción agresiva, están diseñadas principalmente para ser rápidas, ágiles y ligeras. Esta clase de bicicleta son como las del Tour de Francia. El único inconveniente es que la posición de conducción aerodinámica puede resultar incómoda durante periodos prolongados, sobre todo para quienes carecen de flexibilidad o no están acostumbrados a ella. El rendimiento de una bicicleta de carreras se suele maximizar utilizando zapatillas de ciclismo que se encajan en las calas, un tipo de pedal con sujeciones. Éstos mantienen el pie en su sitio, lo que permite ganar impulso a lo largo de toda la rotación del pedal.

• Bicicleta de carretera de resistencia. Diseñadas para pasar largas temporadas en el sillín sobre el asfalto, las bicicletas de carretera de resistencia equilibran la velocidad y la comodidad. Se caracterizan por tener un manillar caído, neumáticos finos y ofrecen una posición de conducción ligeramente más erguida y menos aerodinámica que una bicicleta de carreras de pura raza. Como resultado, son mucho más cómodas en distancias largas, donde minimizar los dolores relacionados con la posición es mucho más importante que una pequeña reducción de la resistencia.

• Bicicleta de contrarreloj. Están diseñadas para hacer una cosa y sólo una cosa: ir lo más rápido posible, con un mínimo de curvas. Como su nombre indica, se trata de una bicicleta de contrarreloj, un tipo de carrera en la que los ciclistas compiten en solitario contra el reloj. La aerodinámica es fundamental en el diseño de las bicicletas de contrarreloj. Tienen que cortar el aire de la manera más eficiente posible, y ponen al ciclista en una posición muy agresiva para conseguirlo. La ventaja de esto es que son extremadamente ágiles. La desventaja es que son notoriamente incómodas y muy poco prácticas para un uso casual y no competitivo.

• Híbrido. Si tu objetivo principal es ir y venir de las tiendas o simplemente dar un paseo sin prisas el fin de semana, una bicicleta de carreras de fibra de carbono o una bicicleta de montaña con suspensión completa es probablemente un poco exagerado. Estas humildes bicicletas híbridas toman lo mejor de una amplia gama de estilos de bicicletas y lo utilizan para crear algo que sea lo suficientemente funcional y cómodo para el ciclista casual de todos los días. Las híbridas suelen tener manillar plano, cambio de marchas de bicicleta de carretera y neumáticos de grosor medio, tanto para el asfalto como para un uso ligero fuera de la carretera. También son uno de los tipos de bicicleta más asequibles y accesibles, por lo que son perfectas para los principiantes o los que tienen un presupuesto limitado.

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